Bienvenida

al Blog

Bienvenida

al Blog.

CONTÁCTAME

CONÓCEME

DISEÑO WEB ESTRATÉGICO

Gestión del Tiempo, Uncategorized

Únete al RETO: “Zen to Done”

Los últimos días han sido extraños, confusos. Aunque pueda parecer que soy una persona ordenada, la verdad es que soy todo lo contrario. El caos ha estado muy presente siempre en mi vida. Tanto a nivel material como a nivel personal.

Descubrir que soy una persona MA y conocer mi ciclo de las pasiones, ha hecho que pueda situarme en el momento presente de cada uno de mis intereses, sabiendo en qué punto estoy y cuál será la siguiente etapa a la que pasaré. Eso me da cierto estado de tranquilidad y seguridad.

No obstante, cada día me doy cuenta que necesito un método, una manera de trabajar organizada para no perder el rumbo. Hay días en los que todo me parece muy claro, muy sencillo. Me pongo objetivos o tareas a hacer y me voy muy a gusto a la cama porque sé que he cumplido con lo que me había propuesto. Normalmente esos días suelo quedarme hasta tarde haciendo dicha tarea pero, hay otros, como me ha pasado en los últimos días, en los que termino los objetivos que me he propuesto antes de hora y, horror, tengo tantas cosas en la cabeza que podría y quiero hacer que me bloqueo. Como no contaba con ese tiempo libre, no me he preparado con antelación para la siguiente tarea, digamos que no estoy preparada mentalmente o que en ese momento no me apetece hacer una cosa concreta. Por lo que termino bloqueándome, voy saltando de una cosa a otra o no disfruto de lo que hago.

Sé que esto es un problema y que siempre lo he tenido. Necesito aprender a parar, a disfrutar del momento, a no tener siempre la vista en el futuro. Suelo sentirme más segura si tengo todo planificado, sí sé que es lo siguiente que va a pasar. Por eso, ante los imprevistos, suelo sentirme perdida, no sé hacia dónde debo avanzar, lo que me lleva a terminar bloqueándome. Y por otro lado, suelo sentirme más segura rodeada de cosas materiales (no tengo el síndrome de diógenes, no te asustes, jajaja), comprando todo lo que veo que “puede serme útil algún día”: libros, cursos, ropa, materiales para mis pasiones (presentes, posibles y futuras), … Imagínate el gasto que supone todo ello. Me imagino que a ti te pasa o te ha pasado algo parecido alguna vez. Gracias a dios este acopio lo he frenado bastante en 2014. Es el primer objetivo que me propuse ¡y hasta he conseguido ahorrar dinero! (Otro día te cuento las tácticas y herramientas que estoy utilizando).

He leído a expertos que todo esto significa que soy una persona insegura y, contradictoriamente, que evito planificar las cosas. Me chocó mucho cuando lo leí porque precisamente me gusta pensar mucho en las cosas futuras, en las posibles salidas u opciones de cada decisión o hecho futuro para “estar “preparada” ante lo que pueda pasar. No sé si va unido a ser MA o es un problema particular mío. Paso etapas en las que tengo muy claras las cosas, mientras estoy centrada en alguna pasión, pero una vez comienzo el proceso de aburrimiento y búsqueda de nuevas pasiones, tiendo a perderme, frustrarme y bloquearme. La verdad es que me pasa casi todo el tiempo. Necesito tener un nivel mínimo de orden para estar a gusto conmigo misma, tener las cosas claras y disfrutar de mi tiempo sin sentirme culpable por no estar haciendo otra cosa o por no saber qué hacer.

Desde hace unos meses intento aplicar una pequeña regla, muy efectiva, cuando siento que me voy a perder o que empiezo a tener la cabeza en otro lado:

CENTRAR MI ATENCIÓN EN LO QUE ESTOY HACIENDO EN ESE MOMENTO

Así de fácil. Si me voy a dormir y empiezo a pensar en lo que tengo que hacer, me digo “Eva, ahora es hora de dormir. Ya pensaré en todo esto mañana”. Si estoy con mis amigos y empiezo a sentirme culpable por no estar haciendo tal cosa o tal otra, me obligo a volver a la conversación. Ahora no es tiempo de pensar en ello. Si estoy paseando a Lúa por el campo, intento desconectar y centrarme en los sonidos de la naturaleza, el olor del campo….

El truco está en parar, detener tu tiempo y centrar todos tus sentidos en lo que estás haciendo en ese momento. Si no lo has hecho nunca, confía en mí. FUNCIONA. Es lo único que me ha servido para aprender a desconectar y dejar la mente en blanco.

En cuanto al tema del caos y del orden. El año pasado leí el famoso libro de David Allen, Organízate con Eficacia, en el que te muestra su método GTD: Getting Things Done. En español sería algo así como: Consigue hacer las cosas. La verdad es que el libro me encantó, me dio una energía increíble y terminé de leerlo pensando que podía ser capaz de organizarme y conseguir todo lo que me propusiera. El método consiste en crear listas de tareas con todo lo que tienes que hacer: objetivos, responsabilidades, proyectos, recados, … y aprender a procesarlo. Para mí, es un imprescindible si quieres ordenar tu vida. Cambió muchas, muchas cosas en vida, en mi manera de organizarme en el trabajo, en mis atascos con el correo electrónico, en dejar de agobiarme por lo que no estoy haciendo mientras realizo otra tarea…

Me ha dado diversas herramientas para trabajar, muy útiles. Pero la verdad es que, tras varios meses intentando llevar el método, no he sido capaz de hacerlo y mi bandeja de entrada vuelve a estar hasta arriba. Quizás la base del GTD es buena, pero el método y algunos pasos a realizar son bastante complicados de llevar a cabo. Por lo menos para mí. Hay partes que han resultado ser demasiado complejas porque el libro no explica demasiado cómo llevarlas a cabo. Al igual que te pierdes en multitud de cosas por hacer, yo me perdí en multitud de listas de tareas y en cómo procesarlas adecuadamente.

Leí que había otro método paralelo que se basaba en el método de David Allen, pero llenaba esos vacíos y esos defectos que dejaba el método GTD. Se llama ZTD (ZEN TO DONE), de Leo Babauta. Las mayores diferencias con respecto a GTD, según Leo, son:

  • Para aplicar correctamente GTD tienes que cambiar de golpe un montón de hábitos en tu vida. De la noche a la mañana. Esto es cierto. Como os comentaba antes, sales del libro cargada de energía pero la verdad es que si eres como yo, que no tienes mucha paciencia en esto de aprender y quieres que las cosas sucedan “ya”, termina siendo agobiante. ZTD se basa en ir adquiriendo hábitos, poco a poco, uno detrás de otro y a tu elección. Son 10 hábitos pero adaptas el aprenderlos o no a tu forma de ser. Si un hábito no es para ti, no lo adquieres y ya está.
  • GTD se centra en captar tareas y procesarlas a listas, pero no da una buena metodología en cómo llevarlas a cabo. Doy fé.
  • Tampoco da una metodología del qué hacer, no crea una estructura real sobre qué hacer a continuación. Creo que uno de los principales motivos de fracaso en mi caso es éste. Por mi forma de pensar, la que os he contado al principio. Se supone que ZTD te ayuda a resolver este problema.
  • GTD abarca demasiado: toda la información que entra a tu vida debe ser procesada. En mi caso fue uno de los motivos de fracaso también. Había listas con las que no tenía problema en llevarlas a cabo, las del trabajo, pero otras se me hicieron imposible (en casa me fue imposible aplicarlo). Tanto, que terminaró por desmotivarme y hacer perder el método en todas mis listas.
  • GTD no tiene en cuenta tus objetivos y metas. Se centra simplemente en procesar lo que te llega sin tener en cuenta lo que debes hacer para conseguir tus propósitos. Bueno, no sé, realmente pienso que se podría elegir dar más prioridad a una lista de tareas que otras si tienes claros tus objetivos. Esta afirmación no la tengo muy clara.

Lo bueno que le veo a ZTD, si cumple todos los propósitos que promete, es que te ayuda a crear hábitos (que seguro te ayudan a organizarte mejor, que es el objetivo). La metodología es la siguiente: durante 30 días hay que trabajar un hábito. Sólo uno. Y pasado ese tiempo, se pasa a otro.

Imagino que si se aplica de verdad y de forma constante se llega a adquirir ese hábito, así que como estamos apunto de comenzar el mes de julio, te invito a que te unas al reto conmigo:

Vamos a conseguir convertirnos en personas organizadas

Únete al RETO: ZEN TO DONE

La primera semana de cada mes te daré las pautas para adquirir cada uno de los 10 hábitos que propone Leo Babauta en su método ZTD:

LOS 10 HÁBITOS A CONSEGUIR MEDIANTE “ZEN TO DONE”

1. RECOGER: Aprender a capturar toda la información de tu cabeza y trasladarla a un bloc de notas u otra herramienta.
2. PROCESAR: Aprender a tomar decisiones rápidas sobre tu bandeja de entrada para no acumular las cosas y no postergar las decisiones.
3. PLANIFICAR: Aprender a marcarse objetivos y saber programarlos correctamente.
4. HAZ: Aprender a centrarse en una tarea y realizarla, sin distracciones.
5.SISTEMA DE CONFIANZA y SIMPLE: Aprender a utilizar listas sencillas, sin complicarnos la vida y sin hacernos perder el tiempo.
6. ORGANIZAR: Hay un lugar para todo. El hábito es aprender a poner las cosas donde deben estar.
7. REVISAR: Aprender a revisar semanalmente nuestro sistema y nuestros objetivos.
8. SIMPLIFICAR: Aprender a reducir nuestras metas y tareas a lo esencial.
9. RUTINA: Aprender a establecer y mantener rutinas.
10. ENCONTRAR TU PASIÓN (en nuestro caso, nuestras pasiones): Aprender a no procrastinar y buscar cosas que te apasionan.

Recuerda lo importante: céntrate en aprender los hábitos que sean para ti. En el orden que quieras. Yo voy a seguir el mismo orden que propone Leo en su libro:

               1. En JULIO, el hábito de RECOGER.

               2. En AGOSTO, el hábito de PROCESAR.

               3. En SEPTIEMBRE, el hábito de PLANIFICAR.

               4. En OCTUBRE, el hábito de HACER.

               5. En NOVIEMBRE, el de APRENDER A CREAR LISTAS SENCILLAS.

               6. En DICIEMBRE, el hábito de ORGANIZAR.

               7. En ENERO, el de REVISAR.

               8. En FEBRERO, el de SIMPLIFICAR.

               9. En MARZO, el de ESTABLECER RUTINAS.

               10. En ABRIL, el de NO PROCRASTINAR.

Son 10 meses, sí. Y viendo la lista entera casi hasta te abrumas un poco pensando en todo lo que hay que hacer, pero seguro que no es tanto como parece. Hay que centrarse en el objetivo final. Si somos capaces de adquirir estos hábitos, ¿os imagináis tener una vida ordenada, sin bloqueos, sin agobios por no llegar a todo?

***

Yo sí me la imagino, porque es una de las cosas que quiero conseguir. Y si yo puedo conseguirlo, que soy la persona más caótica y desordenada del mundo, seguro que tu también. Así que te vuelvo a preguntar: ¿te animas a unirte al Reto “Zen to Done” e intentarlo conmigo?

***

El post de Únete al RETO: ZEN TO DONE aparece primero en Nuevas Ideas, Nuevos Comienzos.